El violento interrogatorio, según nos ha informado su familia, le ha dejado una dolorosa huella en su cuerpo: multitud de heridas y marcas de entre otras, las quemaduras producidas por cigarros. Como puedes imaginarte, este joven no ha obtenido un espacio en las noticias de los informativos por haber sido retenido ilegalmente. Ni por haber sido torturado. Ni por ser víctima de un juicio injusto.
Si no fuera porque has abierto este email y ahora conoces parte de su historia, Ennaâma hubiera pasado desapercibido. Sería tan sólo un número más en las listas de víctimas de violaciones de derechos humanos. Por eso estamos aquí, pidiéndote que tú le des ese espacio relevante y necesario que Ennaâma necesita para que no vuelva a ocurrir. Ayúdanos a exigir a las autoridades marroquíes que se haga justicia. Y si quieres dar un paso más, hazte socio de Amnistía Internacional. Todavía haces falta.
Esteban Beltrán
Director – Amnistía Internacional sección española
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