Contaminación, calentamiento global y política

Por Carlos López Dzur

La Extrema Derecha ha buscado politizar el asunto del calentamiento global y toda la gama de problemas ambientalistas, de la contaminación de los suelos a la defensa de los bosques y ríos. La Madre Tierra es una metáfora hueca y mistificada, según los que alegan que se trata de una conspiración de la una Nueva Izquierda anticapitalista y utopizante. Cree que cerrando los ojos y oídos ante lo que el ecologista dice y seguirá diciéndole desaparecen los problemas señalados. Esa actitud es otra ala de los extremismos de la Derecha.

Explican que la ecología es asunto del odio de ciertos grupos y el elitismo liberal al capitalismo. Esta es una cómoda y parcializada posición de quienes quieren tapar el cielo con un dedo e ignorar que el hombre daña los ecosistemas e inclusive a sí mismo, a la raza humana. Cree sentirse importante por utilizar el lenguaje jactancioso de los Know-Nothings nativistas del Sur y los comefuegos de la década confrontativa del ' 60. Por otra parte, están los que acusan al Movimiento Ecológico de ser el «consenso de una ortodoxia maquinada» que, por alarmista, conduce al escepticismo; empero, goza de la promoción de los medios de información («Cycles of media hysteria») . En ese sentido, lo más interesante que he leído es la exhortación a la prensa del Senador James Inhofe, «A Challenge to Journalists Who Cover Global Warming» que da muy buenas ideas de lo que el movimiento se debe de cuidar y concluye bien: «Global warming was not caused by natural climate variations». Lo ocasiona la actividad humana. «Global warming is due to human activity».

James Inhofe escribe con razón de que la gente se cansa, se satura de las contínuas imágenes que recuerdan el trato que damos a la Madre Tierra, la apatía al sentido de conservación y las consecuencias:de la contaminación. Aún así, hay una responsabilidad: «Report on the objective science of climate change, to stop ignoring legitimate voices in this scientific debate and to stop acting as a vehicle for unsubstantiated hype».

Quizás el recurso humano, si lo consideramos el más valioso y digno, y que sin embargo se pierde a millonadas, es lo más riesgo en este horizonte por la cantidad de vidas desaparecidas o dañadas por el hambre. Y, entre los mal llamados «consevadores», ¿hay de veras una actitud que diga: «Ayudémosle»? No. Al contrario, su mensaje es que no son una civilización. Son prescindibles. Mejor es que se mueran. No en balde, unos políticos prestigiosos de Norteamérica y el mundo han llegado a decir, so riesgo de que los involucren en la «demencia verde» que el deterioro ambiental ocasionado por la industria estadounidense es inclusive, potencialmente mayor, al terrorismo. «The environmental damage caused by American industry is a greater threat than terrorism».

Hay muchas observaciones acertadas en el libro The Politically Incorrect Guide to Global Warming and Environmentalism (2008), escrito por Christopher Horner, aunque no es un libro sobre ambientalismo exactamente, sino sobre la inevitable politización en que ha caído el movimiento. Christopher C. Horner tiene razón al alarmarse ante la «manipulation ode asuntos ambientales para propósitos políticos» que se viene llevando a cabo, especialmente cuando el ex-vicepresidente Al Gore se autonombra el padrino de estas causas. Donde se equivoca Horner es al frivolizar la magnitud y las evidencias incontrovertibles de que la actividad económica y la negligencia humana pueden llevar a una catástrofe, el calentamiento global.

Tomar este señalamiento como un signo de histeria es tan peligroso como dejar que un mal se empeore para aplicar el remedio. «Catastrophic man-made global warming» no es una premonición, sin base, es una observación sistemática de quienes estudian sus efectos, no desde una oficina con aire acondicionado en Washington, D. C. o una «suite ejecutiva» de los dueños de corporaciones. La sólida confirmación científica de muchas de las propuestas del actual Movimiento Verde, o Ambiental, será el premio final.

Quienes se oponen al Movimiento / las iniciativas ecológicas / no quieren creer el calentamiento global es real. Pero lo es. Se siente. Es, además, producido por el género humano. Hasta el año 2006, se ha determinado que el «El dióxido de carbono, CO2, ha aumentado por un 36%», más alto que el promedio en los tiempos preindustriales. Hay un vínculo entre el industrialismo desaforado y la contaminación. Cerca del 80% del dióxido de carbono proviene de las actividades humanas y entró al aire y continúa haciéndolo después de 1940.

Los ambientalistas responsables que están estudiando el Calentamienton Global, si bien estudian la evolución del problema, no son alarmistas. S. Fred Singer, autor Unstoppable Global Warming: Every 1,500 Years, decano de la School of Environmental and Planetary Sciences en la University of Miami, y profesor emérito de Ciencias del Ambiente de la University of Virginia, explica que el Calentamiento Global no producirá la extinsión en masa del género humano ni de insectos ni violentas tormentas ni hambre ni inundaciones ni erosiones del suelo. A lo único que se limita el Dr. Singer es explicar que la acumulación del CO2 está creciendo, en cada década, a un ritmo del 7% y cuestionar que la atmósfera esté, por causa del CO2, «saturada» con rayos infrarrojos. Estamos viendo a un científico ambientalista que arguye los verdaderos mensajes que desmienten la tentativa de la Extrema Derecha de poner en duda la validez del ambientalismo y a sus activistas y que a todos los mete en la misma canasta fraudulenta: la lista de los alarmistas que Horner ha preparado para sus ataques. Acuérdense que la Derecha funciona como la entidad policial que elabora lista de proscritos y enemigos, como el viejo Senador McCarthy.

Lo que el Dr. Singer exhorta es cautela ante el hecho de que la Tierra vive un ciclo de calentamiento y enfríamientos que él llama «the 1500 year cooling and warming cycle». El proceso total del ciclo es lento: 0.125 grados Centígrados por década y no es primariamente asunto sólo de la producción de CO2. ¿Es suficiente tal panorama ofrecido por Singer. La única recomendación de Singer es que, si deseamos una civilización próspera, es preferible tomar pasos hoy por que los combustibles fósiles, inluyendo el carbón, no existirá por siempre. Que no esperemos un par de siglos más a que el contenido indeseado de dióxido de carbono en la atmósfera sea cinco o seis veces más alto que hoy.

De ningún modo, Singer imita los recuentos de The Weather Makers, un libro de Tim Flannery. que cuantifica, geológicamente, la liberación masiva de CO2 que provocó las extinciones de vida vegetal y animal que ocurrieron hace 55 millones de años. El Dr. Singer, en Unstoppable Global Warming, es todavía para tranquilizador que el coautor de su libro, Dennis Avery. Es este último quien especula que, en dos tres siglos, más una vez se agote el carbón y el petróleo, pudiéramos vernos en el regreso de vida en las cavernas. Quizás no, los EE.UU., que consume el ___ mundiales, pero los países más pobres.

Bill O'Reilly ha dado un consejo al Congreso y los políticos anti-ecologistas de la Estrema Derecha que está presionando por los derechos a la exploración de las cuencas petroleras dentro de la nación. En su artículo «Oil and Trouble» B. O'Reilley, dice: «El Congreso debe requerir por ley que los manufacturadores de carros y camiones comiencen a producir un alto porcentaje de vehículos de combustible eficiente. Una vez que se aprobara la ley, las gasolineras comenzarán a instalar bombas cuyo combustible sea. El Congreso también debe bajar ese tipo de tarifas al combustible de alcohol de mpodo que países como Brasil puedan venderlo a nosotros». [«Congress must mandate by law that American car and truck manufacturers begin to produce a high percentage of flex-fuel vehicles. Once that law is passed, gas stations will begin installing alcohol-based fuel pumps. Congress must also drop import tariffs on alcohol-based fuel so countries like Brazil can sell them to us».]

Pese a que la Administración Bush y el candidato presidencial republicano John McCain presionan para que siga la dependencia económica de la nación a la explotación de combustibles fósiles, carbón, gas natural y petróleo, se encuentran con la dificultad de que la exploración de yacimientos petrolíferos en las costas estadounidenses está bajo una prohibición protectiva, por ley federal. En la esperanza de resolver el grave encarecimiento del galón de gasolina en el mercado doméstico y declarar una Independencia del Consumo de Petróleo del Oriente Próximo, Bush y McCain combaten la prohibición que fue aprobada hace 27 años.

Suponiendo la imposibilidad de arrebatar al Gobierno Federal las tierras costeras, con yacimientos de petróleo y cumplir con ello promesas de campaña, McCain, por igual, anunció su entusiasmo ante la posibilidad de construir 45 reactores nucleares, con fondos federales, plenamente operables para el año 2030, a un costo de $2 billones anuales. El fin es dar otro paso que reduciría la dependencia del petróleo extranjero y, en adición, «to make clean coal a reality». Ver

Si se toman las medidas necesarias para albergar en depósitos aislados y controlados los residuos nucleares por el tiempo necesario, no creo que el movimiento ecologista encienda su ira contra los 45 reactores que propone McCain, con su politiquería oportunista de tener a Dios y el Diablo a la vez en materia de energía. Si les falla la Exploración Petrolera Doméstica, tendrá en la otra mano su lluvia de Reactores Nucleares. Afortunadamente, sobre este tipo de industria se ha aprendido mucho en los últimos años e inclusive de sus peligros. La energía nuclear genera una gran cantidad de energía eléctrica, si bien también residuos nucleares. Afortunadamente, la energía nuclear no produce contaminación atmosférica de gases derivados de la combustión. Tampoco precisa el empleo de combustibles fósiles convencionales.

CONTAMINACION: Se ha comentado muchísimo que el ecologismo es la ideología más recientemente promovido y empotrado en el repetorio de preocupaciones de la sociedad. Mas ciertamente los antecedentes no son nuevos. Proviene de «las actitudes higienistas del siglo XIX, puesto que el deterioro del medio natural está ligado directamente al aumento de la industrialización en todos los países de Occidente, y a la utilización de combustibles fósiles y recursos no renovables, así como a la sobreexplotación de los mismos». Enciclopedia Libre Universal en Español Por las implicaciones que tiene el ecologismo, la Extrema Derecha pro-corporativa reniega de sus ideas y recomendaciones. «Las implicaciones económicas permiten que hagan bandera del ecologismo todas las ideologías políticas y económicas». Christopher Horner admite que las ideas ecologismo apelan a grupos de izquierda, especialmente, a los desencantados con el socialismo soviético y maoísta y el anarquismo radical. En los años '60 del siglo XX, en movimientos extraparlamentarios, el ecologismo reacciona contra la política de bloques de la guerra fría y no se identifican ni con el capitalismo ni con el socialismo existente, lo que no es óbice para que se les moteje dentro de los aspavientos de los que «odian la properidad y el consumismo capitalista», «obstructores del desarrollo», portadores de mensajes catastrofistas o alarmistas y muchos otros epítetos.

El ambientalismo choca no sólo con la estrechez de los intereses industriales, la industria militar y el corporacionismo transnacional. Desde que, en 1965, Murray Bookchin resumió el pensamiento ecológico en su libro Ecología y pensamiento revolucionario, en Alemania y los EE.UU.. sus militantes combinan su posición por la no violencia y el pacifismo con presiones para la descentralización del poder económico y la formación de circuitos locales de comercio. La presencia de los ecologistas se vuelve política con los pacifistas antinucleares, que ponen de relieve los peligros de la radiactividad y las centrales nucleares. En España, por ejemplo, el primer planteamiento ecologista del tiempo moderno se relaciona a la reacción antinuclear en muchos municipios, contra las autoridades franquistas del gobierno, cuando presenta un plan de energía nacional que incluye la instalación de varias centrales nucleares. Antes de la llegada de la democracia en 1978, la influencia divulgativa de las ideas ecologistas fue la de hacen Félix Rodríguez de la Fuente y Jaques Cousteau. no la de Bookchon.

De hecho, la militancia ecologista asombró el establecimiento político por su exitosa visibilidad y poder de convocatoria. Como unos de sus méritos, se elogia que el Movimiento «ha sido capaz de implicar en la defensa del medioambiente a cada persona». El mensaje que ha dado sobre la reducción de los residuos, la disposición y control adecuada de desperdicios, el consumo de energía, la limpieza del aire, la defensa comprometida de una especie o lugar concreto y otros, origina poder, cohesión emocional y espiritual entre el hombre y el medio, no como una simple moda «sentimentaloide», como dice Horner.

Falso y exagerado en la interpretación de Horner es obviar que «la ecología política y el ecologismo no siempre son partidarios de un ecocentrismo». Y que cada vez el Movimiento Ecologista deviene mejor organizado, armado de investigación científica y fidedignamente consciente de la realidad. Pero sí, ciertamente, para el ecologista coherente, el estímulo básico de su militancia se expresa como: «Una actitud ante los seres humanos: no basta con respetarlos, sino que es preciso interesarse activamente por los demás. El egoísmo y la comodidad no son propios del buen ecologista, que siempre será servicial, y buscará habitualmente el bien de los demás, incluso el bien para sus almas», Ecologismo coherente

Olvidémonos, por de pronto de asuntos que, en el movimiento ecologista, son temas de largo plazo y globales. Dentro del ecologismo coherente nacional, el problema con el que luchamos más frecuentemente es la contaminación. Los temas del Cambio Climático, el Agujero en la Capa de Ozono, la negociación efectiva de iniciativas como la Cumbre de la Tierra, celebrada en Río de Janeiro en 1993 y el Protocolo de Kioto en 1998, son secundarios ante los dilemas locales de contaminación.

Quien no se olvidará es la delegación gubernamental de EE.UU., a quienes en Kioto (Japón) se les acusó directamente, diciéndoseles «ustedes originan el 25% de los gases que causan el efecto invernadero». Se les emplazó a reducir un 7% de las emisiones. Por supuesto, los EE.UU. dijo que no. Prometió no firmar el Protocolo. Ver Olvido es demora. Los funcionarios de EE.UU., al menos en la Administración Bush, admiten que hay un problema ambiental (antes G. W. Bush, Jr. fue escéptico ante el tema del calentamiento global); pero, el año pasado, entendió que es necesario recortar las emisiones en la industria energética en un plazo a partir de 10 ó 15 años, siendo que los EE.UU. es uno de los principales países emisores de dióxido de carbono. En un discurso en Casa Blanca, al menos, ya no hay olvido lo que se propone es demora. «Bush propone frenar la emisión de gases contaminantes en EE.UU. para 2025»: Ver

TRANSFERENCIA DE LA CONTAMINACION: Sobre lo que se quejan los países pobres del mundo y que, sin embargo, alegra a los críticos primitivistas del ecologismo es por la transferencia de los agentes contaminadores. En un artículo de Peter Turner, fundador de Atlantic-Pacific Alliance, este investigador dice «la contaminación (presencia de agentes regulados en aire, agua, etcétera) ha disminuido bastante en EEUU. Por ejemplo: dióxido de nitrógeno, un 41% menos entre 1976 y 2003; plomo, un 98% menos en el mismo periodo». Al explicar el éxito de algunas posiciones ecologistas, en el contexto de reducciones arancelarias (del 8% promedio al 4% entre 1974 y 1994, habidas en el comerio, Turner observa que «la ocurrencia simultánea de menor contaminación e incremento de las importaciones es la parte de verdad de la propaganda...el Gobierno norteamericano», está realizando negocios con países, cuyo énfasis es la industria limpia (quiérese decir, menos contaminante).; por esta razón, «la importación de bienes a EE.UU. está aún más libre de carga contaminante» que la que los EE.UU. envía a los países con que contrae comercio y donde el Presidente Bush dice que difunde «las tecnologías novedosas que permitan mejorar el nivel de vida y, a la vez, reducir las emisiones contaminantes».

Turner alega que si «se ha trasladado la contaminación de EE.UU, a países no pertenecientes a la OCDE, si la deslocalización y el aumento del comercio ha desplazado procesos de gran intensidad de polución a países en desarrollo, hace falta más análisis antes de poder hacer esas afirmaciones». Mas ésa ha sido la norma.

CONTAMINACION, CUERPO Y SOCIEDAD: k

(1) El Dr. Nino Kuenzli, profesor de Salud Ambiental en la Universidad del Sur de Calfornia, presentó en 2004, en el que halló que la contaminación atmosférica puede ocasionar hasta en un 15% los niveles de aterosclerosis en las arterias del cuello y la progresión de enfermedades arteriales. La exposición prolongada a condiciones atmosféricas de contaminación causan reacciones inflamatorias en el tracto respiratorio y en los vasos sanguíneos, provocando daños arteriales. Algunas partículas tóxicas pueden llegar hasta la sangre y de ahí al cerebro. El Dr. Kuenzli y su equipo de investigadores estudiaron cómo la atmósfera contaminada «se convierte en un agente externo perjudicial para el organismo que provoca reacciones infamatorias defensivas por parte del sistema inmunitario. Ensancha y calcifica las paredes arteriales y las rompe», dice el estudio que se presentó a consideración de la Asociación Americana del Corazón durante un simposio en Nueva Orleans. Ver

(2) Los productos con sustancias tóxicas, cancerígenas, que se encuentran dentro de la cadena alimentaria y entre los electrodomésticos, afectan el sistema reproductivo, funcionan como «disruptores endocrinos», dismnuyen la calidad de la esperma, forjando jóvenes menos fértiles y, en España, esa exposición a sus sustancias cancerígenas hace que mueran 4 veces más personas que las que mueren en accidentes laborales. De ahí la importancia de que los ciudadanos lean sobre lo que comen y asuman un interés especial y responsabilidad como consumidores. Ver

(3) Jay Fein, director de la División de Ciencias Atmosféricas de la National Science Foundation. (NSF) y un equipo de equipo de científicos del Earth Observing Laboratory del National Center for Atmospheric Research (NCAR) de Estados Unidos, realiza un estudio sobre las nubes de polvo en suspensión y elementos contaminados que originan las industrias asiáticas y que viajan hasta Norteamérica. El Dr.Fein se interesa en el estudio del polvo y aerosoles antropogénicos (como el negro de carbón que se origina en la combustión incompleta de determinados combustibles (o los sulfatos) y de aire contaminado procedentes de Eurasia, a través del océano Pacífico, hasta Norteamérica, y que es «uno de los mayores eventos contaminantes de nuestro planeta». Fein añade el hecho de que «los aerosoles contaminantes están entras las mayores incertidumbres de las causas del clima y supone un relevante desafío social». Las columnas contaminantes, como los sulfatos, enfrían el planeta al bloquear la incidencia de la radiación solar sobre la Tierra, explica Fein. «Otras, como las del negro de carbón, absorben la luz del sol igualmente y pueden amplificar por tanto los efectos del calentamiento global». Ver

(4) Un estudio que analizó datos de un sondeo de 500,000 adultos que se inscribieron en 1982 en un proyecto de prevención de cáncer de la Sociedad Norteamericana de Cáncer concluyó que «la contaminación del aire en las ciudades estadounidenses causa el doble de muertes por infarto que por cáncer pulmonar y otros males respiratorios». El principal investigador C. Arden Pope III, epidemiólogo de la Universidad Brigham Young en Provo, Utah, dijo que respirar partículas muy probablemente tiene un impacto directo en los pulmones. «Más de dos terceras partes de las muertes causadas por contaminación del aire son cardiovasculares, comparado con las enfermedades respiratorias», dice el Dr. Pope, quien hizo un estudio previo , junto a otros investigadores en marzo del 2002 y publicado por el Journal of the American Medical Association. Los investgadores dicen que los estudios de Pope contienen «las más sólidas evidencias existentes sobre la conexión entre contaminación del aire y muertes por cáncer pulmonar». Ver

(5) La contaminación por diesel –largamente identificada como de alto riesgo para la salud de las comunidades portuarias del sur de California– es el mayor contribuyente a los problemas de calidad del aire en las diez principales ciudades portuarias de los EE.UU. «Todos estos puertos generan severos efectos sobre la salud de los habitantes de esas comunidades», afirma el autor del estudio, James Cannon. Los Puertos de Long Beach y Los Ángeles tienen un programa conjunto para recortar las emisiones un 50% para el 2012. El Puerto Houston, por ejemplo, tiene un serio problema de calidad de aire a causa de los crecientes niveles del comercio marítimo, y de la gran concentración de refinerías petroleras y fábricas de productos químicos. En opinión de Cannon, «el Houston Ship Channel es un desastre ambiental». Ver

(6) El Proyecto Vulcano (Vulcan Project), financiado con el apoyo económico de la NASA y del Departamento de Energía de EE.UU, tras dos años de análisis ha plasmado en imágenes el mapa de la contaminación medioambiental en los Estados Unidos de América. Ver

(7) Los EE.UU. y China efectúan trabajos conjuntos para luchar contra la contaminación del suelo y del agua. Los dos países están llevando a cabo un esfuerzo internacional llamado International Workshop on Monitoring and Modeling Non-Point Source Pollution (NPSP). La NPSP es la contaminación originada en diferentes fuentes y que contamina los suministros del agua y del suelo. Los pesticidas, elementos tóxicos en cantidades minúsculas, residuos de ganado y las sales son los principales culpables de esta contaminación. el medio ambiente y el uso de modelos de computadora para estudiar los problemas de NPSP. Con un modelo de computadora denominado HYDRUS, este proyecto ecológico diseña unos sistemas de irrigación y de drenaje para proveer los niveles óptimos del agua a las cosechas mientras reduce al mínimo el movimiento de fertilizantes y pesticidas al agua. Ver

(8) La Agencia de Protección Ambiental afirma que la contaminación del aire ocasiona 15 mil muertes prematuras y 95,000 casos de bronquitis crónica cada año en los EE.UU.. Unos 100 millones de personas viven en la región de 22 estados, que incluye áreas de Washington D.C., Nueva York y el sur de California, donde en el tercio oriental del país, se encuentran la violación de los estándares federales de hollín. En 2004, se dispuso una regulación para controlar la contaminación por hollín. Ver

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Bibliografía

S. Fred Singer y Dennis Avery, Unstoppable Global Warming: Every 1,500 Years.

David Espo, «McCain calls for building 45 new nuclear reactors». Asociated Press. Ver

Christopher Horner, The Politically Incorrect Guide™ to Global Warming and Environmentalism. H

Ecologismo en España. Enciclopedia Libre Universal. Ver

Olga Castro-Perea, «EE. UU. estudiará cómo la contaminación asiática acelera el cambio global», en: Tendencias Sociales. Ver

«La contaminación en ciudades de EEUU aumenta el riesgo de infartos». Agencia AP. Diciembre 17, 2003. Ver