ROSA ALCÁNTARA
Contrario al año 2008, cuando el presidente Leonel Fernández solo tuvo de frente a Danilo Medina a lo interno del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) para lograr la candidatura que lo reeligió, en la actualidad el mandatario enfrentaría múltiples piedras en su camino para, si se lo propone, alzarse con la victoria y seguir más allá del 2012.
Lo primero es que el presidente Fernández no podría reelegirse porque tiene un impedimento constitucional. El artículo 124 de la Constitución reza que “el Poder Ejecutivo se ejerce por el o la Presidente de la República, quien será elegido cada cuatro años por voto directo y no podrá ser electo para el período constitucional siguiente”.
A lo interno del partido del cual es presidente, vuelve a tener como su principal adversario a Danilo Medina, quien cuenta en el Congreso Nacional con varios legisladores que votarían en contra de una modificación a la Carta Magna.
Además, al mandatario le desfavorece la matrícula que tiene en la Cámara de Diputados el Partido Revolucionario Dominicano (PRD). Para producirse una reforma constitucional se debe contar con las dos terceras partes de los votos de la Asamblea Nacional Revisora. Hay 183 diputados y 32 senadores. El PLD cuenta con 31 senadores y 99 diputados más los nueve reformistas (seis de ellos ganadores en la alianza), mientras el PRD tiene 75 diputados.
Para el presidente Fernández reformar el artículo 124 de la Constitución, tendría que tener a su favor a todos los legisladores del PLD, a los nueve reformistas y cuatro del Partido Revolucionario Dominicano (PRD). En total 143 asambleístas.
Voces autorizadas en contra. Además de los legisladores peledeístas que se mantienen firmes con Danilo Medina y que se han pronunciado públicamente en contra de la reelección, voces autorizadas de sectores importantes de la sociedad dominicana han mostrado su rechazo a que el mandatario se involucre en una nueva reforma constitucional que le permita repostularse en el 2012. Se han pronunciado en ese sentido el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, monseñor Agripino Núñez Collado, y el presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), Lisandro Macarrulla, entre otros.
Ayer se sumó a los sectores que se oponen a que se reforme la Constitución para que se permita una reelección, el presidente de la Asociación de Industriales de Herrera, Wadi Canó.
Los pronunciamientos del senador peledeísta Dionis Sánchez, de que 23 senadores estarían calentando la maquinaria reeleccionista provocó la reacción de rechazo del arzobispo de la arquidiócesis Santiago, monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio, señalando que “por ambiciones políticas no se puede cambiar, que busquen los medios que les dé la gana para hacer lo que quieran, pero que no cambien la Constitución de la República”.
Otra situación desfavorable para Fernández es el retiro de apoyo de sus aliados al PLD, como el BIS.
LF ¿va o no va?
Hasta ahora son conjeturas las que se han manejado a nivel de los medios de comunicación respecto a si Fernández reformaría la Constitución que le permita ir en 2012. Las mismas se derivan por las señales que el mandatario ha dado, citándose las vallas publicitarias y los funcionarios del Gobierno que promueven la reelección. Hay analistas que creen que el presidente Fernández no se arriesgaría a reformar la Constitución que promovió y que fue proclamada el 26 de enero pasado. Otros entienden que el jefe del Estado podría tener debajo de la manga un resquicio que le pudiera permitir ir en el 2012 sin necesidad de modificar la Constitución, y refieren, específicamente, a través de una decisión del Tribunal Constitucional. Otros creen que Fernández no iría porque las circunstancias no le favorecen y éste estaría incitando su promoción para no sentir la soledad del poder. Además, dicen, buscaría tener poder de decisión a la hora de la escogencia del candidato presidencial del PLD, es decir, que sea el que él señale. El interés del mandatario en mantener su vigencia como el líder de su partido y del país se evidencia en la realización de los consejos de Gobierno y las asambleas provinciales del PLD a partir de este domingo.
Lo primero es que el presidente Fernández no podría reelegirse porque tiene un impedimento constitucional. El artículo 124 de la Constitución reza que “el Poder Ejecutivo se ejerce por el o la Presidente de la República, quien será elegido cada cuatro años por voto directo y no podrá ser electo para el período constitucional siguiente”.
A lo interno del partido del cual es presidente, vuelve a tener como su principal adversario a Danilo Medina, quien cuenta en el Congreso Nacional con varios legisladores que votarían en contra de una modificación a la Carta Magna.
Además, al mandatario le desfavorece la matrícula que tiene en la Cámara de Diputados el Partido Revolucionario Dominicano (PRD). Para producirse una reforma constitucional se debe contar con las dos terceras partes de los votos de la Asamblea Nacional Revisora. Hay 183 diputados y 32 senadores. El PLD cuenta con 31 senadores y 99 diputados más los nueve reformistas (seis de ellos ganadores en la alianza), mientras el PRD tiene 75 diputados.
Para el presidente Fernández reformar el artículo 124 de la Constitución, tendría que tener a su favor a todos los legisladores del PLD, a los nueve reformistas y cuatro del Partido Revolucionario Dominicano (PRD). En total 143 asambleístas.
Voces autorizadas en contra. Además de los legisladores peledeístas que se mantienen firmes con Danilo Medina y que se han pronunciado públicamente en contra de la reelección, voces autorizadas de sectores importantes de la sociedad dominicana han mostrado su rechazo a que el mandatario se involucre en una nueva reforma constitucional que le permita repostularse en el 2012. Se han pronunciado en ese sentido el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, monseñor Agripino Núñez Collado, y el presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), Lisandro Macarrulla, entre otros.
Ayer se sumó a los sectores que se oponen a que se reforme la Constitución para que se permita una reelección, el presidente de la Asociación de Industriales de Herrera, Wadi Canó.
Los pronunciamientos del senador peledeísta Dionis Sánchez, de que 23 senadores estarían calentando la maquinaria reeleccionista provocó la reacción de rechazo del arzobispo de la arquidiócesis Santiago, monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio, señalando que “por ambiciones políticas no se puede cambiar, que busquen los medios que les dé la gana para hacer lo que quieran, pero que no cambien la Constitución de la República”.
Otra situación desfavorable para Fernández es el retiro de apoyo de sus aliados al PLD, como el BIS.
LF ¿va o no va?
Hasta ahora son conjeturas las que se han manejado a nivel de los medios de comunicación respecto a si Fernández reformaría la Constitución que le permita ir en 2012. Las mismas se derivan por las señales que el mandatario ha dado, citándose las vallas publicitarias y los funcionarios del Gobierno que promueven la reelección. Hay analistas que creen que el presidente Fernández no se arriesgaría a reformar la Constitución que promovió y que fue proclamada el 26 de enero pasado. Otros entienden que el jefe del Estado podría tener debajo de la manga un resquicio que le pudiera permitir ir en el 2012 sin necesidad de modificar la Constitución, y refieren, específicamente, a través de una decisión del Tribunal Constitucional. Otros creen que Fernández no iría porque las circunstancias no le favorecen y éste estaría incitando su promoción para no sentir la soledad del poder. Además, dicen, buscaría tener poder de decisión a la hora de la escogencia del candidato presidencial del PLD, es decir, que sea el que él señale. El interés del mandatario en mantener su vigencia como el líder de su partido y del país se evidencia en la realización de los consejos de Gobierno y las asambleas provinciales del PLD a partir de este domingo.
PUBLICADO EN EL PERIODICO HOY
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