SARAH PALIN: Candidata republicana a la Vicepresidencia, sus vientos son ruidosos y huracanados, a pesar de una categoría menor. Fue electa Gobernadora de Alaska, su más importante experiencia política hace escasamente dos años. Antes fue alcaldesa de Wasilla, un pueblito aledaño a Anchorage. Palin defiende la enseñanza del creacionismo en las escuelas públicas. Alega que el hombre no causa gran daño al ambiente ni que, con sus actividades, es una causa de los cambios en el clima. Anti-ambientalista, guerrerista, sin experiencia en política exterior, afirmó que estados unidos envió tropas a la guerra de Irak para efectuar una «tarea que viene de Dios». Involucrada en un escándalo de corrupción política. Palin se opone al derecho al aborto; pero defiende los derechos a la posesión de armas.
Por ARTURO CARDONA MATTEI / Escritor puertorriqueño
Este año la temporada de huracanes se vislumbra como una muy agitada, continua y peligrosa. Y para hacernos la vida aún más complicada la misma coincide con el huracán más peligroso de todos: las elecciones presidenciales de los Estados Unidos. Puerto Rico también gozará de ese mismo privilegio. O sea, este año hombre y naturaleza nos tendrán bien ocupados. No se puede bajar la guardia. Tampoco se puede dormir mucho.
La gobernadora de Alaska parece que tiene sus agallas, y ya empezo a mostrar categoría de mujer de estado. Su discurso en la Convención Republicana es una muestra de que es dura en el ruedo político. Un vendaval es un viento fuerte que no llega a la categoría de temporal. Pero los líderes del Partido Demócrata ya han levantado bandera de peligro. Están buscando sus mejores cañones feministas para contrarrestrar esos vientos que vienen de tan lejano horizonte. Alaska es una tierra muy fría, pero esta mujer es de un físico fuerte y un verbo caliente. Aunque aún está por probarse en las grandes ligas políticas de la nación. Y Washington [la capital] la espera con ansias locas.
Hay que ver cómo se van a desarrollar los debates entre los candidatos a la presidencia Barack Obama y John McCain. Y, por supuesto, los que tendrán Joseph Biden y Sarah Palin, para la vice-presidencia. Estos encuentros prometen ser de primer orden. Y pudieran tirar la balanza a uno u otro lado.
Barack Obama ya está inclinado a usar su látigo más candente entre las mujeres líderes de su partido: Hillary Clinton. Esta fogosa mujer parece ser la ordenada para viajar a todo lo largo y ancho de la nación, para moverse de ciudad en ciudad con el único objetivo de disparar todo su robusto arsenal [larga experiencia y verbo demoledor] para ver cómo neutralizan a la regia dama de Alaska. Sería muy arriesgado ajotar líderes machos en contra de una mujer que sale precisamente en busca del voto femenino. La estrategia demócrata parece estar bien pensada y bien aceitada. Pero cualquier desliz puede salir en el corto camino que queda hasta las elecciones.
El 4 de noviembre de 2008, los Estados Unidos abrirán un nuevo capítulo en la historia política del país. O tendrán por primera vez un presidente de la raza negra, o premiarán por primera vez a una mujer con la vice-presidencia. Cualquiera que sea el resultado, los zurdos estarán de pláceme.
Estamos claros, la señora Palin no puede ser tomada a la ligera, pero los dos grandes temas a ser discutidos hasta la saciedad son: la economía y la guerra de Irak/Afganistán. La lógica nos mueve a pensar que primero hay que buscarle una solución final al campo de batalla para luego moverse al campo económico nacional. Ambas realidades son de suma importancia para la estabilidad de los Estados Unidos y el resto del mundo. Y no olvidemos que Rusia se está moviendo y enviando unas señales de que todavía el Oso ruso tiene garras y necesidades de una nación de primer orden. El Aguila lo vigila desde lo alto.
Una economía atacada por tantos flancos tiene a los estadounidenses llegando a la locura. En la depresión de 1929, esta locura se tragó muchas vidas. Hoy el trabajador norteamericano tiene que trabajar más años de lo planificado. Otros, ya retirados, buscan afanosamente algún empleo que los ayude a cumplir con sus compromisos médicos y con las obligaciones que tienen con los bancos. Muchos otros han perdido sus ahorros debido a la gran corrupción que invade al monstruo de la empresa privada. No olvidemos el caso Enrod. Al día de hoy, California y Florida son los estados más duramente castigados por el grave problema de perder sus casas y/o apartamentos. Las quiebras personales siguen su ruta ascendente. Y el desempleo está llevando a la nación a ser una más pobre. Y encima de todo lo anterior, tenemos la naturaleza enviando su furia por el Atlántico, el Pacífico y centro de la nación. Huracanes, incendios y tornados no cejan en su empuje. Las pérdidas son extraordinariamente altas.
La inhumana guerra Irak /Afganistán está acabando con la juventud norteamericana. El que no muere por balas enemigas, muere por sus propias manos. El suicidio entre los soldados es una plaga que va en aumento. Y los más afortunados, regresan lisiados, mutilados, inválidos.
Cristianos y musulmanes hacen alarde de quién tiene las armas más mortíferas.
Caguas, Puerto Rico
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