Cuatro mujeres han sido asesinadas en España, y esto no hay quien lo aguante callado. Si las leyes no son lo suficientemente duras, que las cambien. Si no se cumplen las órdenes de alejamiento, que se castigue de manera más contundente. Ya va siendo hora, de que las mujeres maltratadas o amenazadas, tengan la misma protección que los amenazados por ETA. Y si eso cuesta dinero, que se lo gaste el gobierno, y que se deje de 0´7 por ciento a donde no conocemos. Para limpiar la casa del vecino, hay que limpiar primero la nuestra. Con todas esas ayudas a paises subdesarrollados, quizá se podría pagar la defensa de estas mujeres. A quien le sobre jamón, que lo reparta. Pero mientras un español necesite pan, hay que ponerlo en primer lugar. Ya está bien de demagogia barata. Ayuden a los españoles, y no presuman de dadivosos con paises, que vete a saber, como se reparten lo que les mandan. Primero los nuestros. Descansen en paz estas cuatro mujeres, que nada debian y pagaron.
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